Aprender a vivir, tarea personal

Estamos en una escuela que se llama Vida, en esta escuela debemos aprender a evolucionar y Ser.
SER ¿qué?
Ser nosotros mismos, sencillamente eso, sacar a relucir lo que nuestro ADN y nuestra genética combinada de muchos ancestros nos da una característica única y propia, eso hace lo que somos como individuos.
Ahora reflexionemos acerca de lo que nos impide SER
Desde pequeños somos domesticados para ir acorde a las costumbres, a saber comportarnos en el medio y cultura que nos ha tocado nacer, y estamos muy protegidos (generalmente por nuestros padres).
Al paso de los años viene el identificarse, y de ahí empezar a desapegarnos, surgen las primeras heridas que recepciona el cerebro y se imprimen en el alma, y nace el MIEDO, miedo a ser heridos, miedo al dolor, a la frustración, a la soledad.
En ese momento empezamos a usar las herramientas o mecanismos de defensa, negación, proyección, aislamiento, represión, regresión, reacción, sublimación y (para mí el más peligroso) racionalización!
Procesos todos inconscientes.
Y nos reinventamos y empezamos a ser como los otros desean, para ser aceptados social, laboral, familiarmente.
Esto también ocurre en el amor, y resulta absurdo porque nos enamoramos de un ser como es, pero y si, al igual que todos, ese ser se ha reinventado para ser aceptado, seremos dos caricaturas tratando de vivir en una gran mentira. Al final eso conduce al fracaso.
Sin embargo si ambos se muestran en su realidad, sin máscaras, tendrán momentos difíciles, claro que sí, pero finalmente las esencias puras aprenderán a respetarse, aceptarse y amarse en la realidad.
No seamos títeres de lo que "debe ser"
Seamos lo que somos ENERGÍA DE AMOR, solo eso, y empecemos por amar, aceptar y respetar lo qué y cómo somos en lo personal.
Enseñen a sus hijos a romper las barreras del miedo a mostrarse como son, así evitaremos que vivan en una mentira, inconsciente pero mentira al fin y al cabo, les enseñarán a se mejores aportes a una sociedad que vive supeditada a ideas foráneas ideológicas, o absurdos dogmas religiosos, o domesticación por añejas costumbres, o aquellas que están de moda, sociales.
Sean maestros de sí mismos, para ser maestros de quienes les toca en suerte guiar.
Namasté